agosto 06, 2010

La Mente del Mercado - Capitulo IV - Pensando en Nuestro Dinero


La Economía Conductual es relativamente nueva, Kahneman y Tversky usaron preceptos de psicología para estudiar microeconomía, al ver las teorías usadas por los economistas, como cualquier psicólogo, no entendieron por qué usaban un modelo tan irreal y no aceptaban las críticas de la psicología, los economistas respondían, con alguna razón, que los psicólogos no entendían las teorías que estaban criticando. Sin embargo, el trabajo de Kahneman y Tversky, junto con las formulaciones matemáticas de Camerer eran ineludibles.

Tversky propuso que los humanos son animales que buscan patrones, y los encuentran, ya sea que estén ahí o no. Propusieron, junto con Kahneman que se usan heurísticas de juicio, como atajos mentales, para simplificar el proceso de pensamiento. Estas heurísticas aunque por lo general funcionan bien, dan lugar a falacias sistemáticas como; falacia de representatividad, anclaje, sesgo de retrospectiva, endowment effect y sesgo de confirmación, donde se ignoran o reinterpretan los datos que van en contra de nuestras creencias.

Tendemos a creer que las muestras pequeñas son representativas (falacia de números pequeños) y se estima un evento como más probable si se recuerda con facilidad (si es accesible) por ejemplo, se pide a un grupo de sujetos que imagine que gana el candidato A y a otro grupo que imagine que gana el candidato B, luego se pregunta a ambos grupos cuales son las probabilidades de que cada uno de los candidatos gane, estos son candidatos reales antes de una elección por lo que se espera que los estimados sean más o menos los mismos, pero se vió un claro sesgo hacia el candidato que habían imaginado.

La ley de los grandes números dice que con una muestra lo suficientemente grande, eventos muy poco probables van a ocurrir con seguridad. Teniendo en cuenta la cantidad de transacciones que hay todos los días es seguro que algo muy extraño le va a pasar a alguien en algún lado.

El dinero no se evalúa únicamente por su utilidad final, por ejemplo, a la gente le desagrada tener que pagar extra para comprar algo con tarjeta de crédito, pero le gusta que haya un descuento por pagar al contado, aunque el precio sea el mismo. Tenemos aversión al riesgo, si se le propone a alguien entrar a un juego donde seguro pierde 5$ y tiene 25% de probabilidades de ganar 10 es poco probable que acepte, pero si se le propone comprar una lotería con 25% de probabilidades de ganar 10$ que cuesta 5 es probable que sí acepte, en el primer caso los 5$ están vistos como una pérdida en el segundo no.

El famoso experimento de las cartas de Wason demuestra que tan malos somos para el razonamiento simbólico. Se presentan cuatro cartas:


Cuáles es necesario dar vuelta para probar que “si una carta tiene una vocal de un lado, del otro hay un número par”
Que tal si sos un barman, empezando tu turno y la edad para tomar alcohol es de 21 años. Hay cuatro personas en la barra, una toma cerveza, la otra gaseosa, otra tiene 25 y la última 15.Cómo sabes cuando se rompe la regla?


Tendemos a buscar confirmación de las afirmaciones en lugar de intentar falsarlas, especialmente cuando se trata de conceptos abstractos, sin embargo mejoramos notablemente si las premisas presentadas tienen un contexto práctico y se nos pide detectar “tramposos”.

(Las cartas que deben darse vuelta son la E y el 7)

Síntesis de The Mind of the Market - Capítulo IV- Minding our Money. Por Michael Shermer


Capítulo 3

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